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¿Cuándo puedo comenzar la alimentación complementaria de mi bebé? ¿Cómo sé si mi bebé está listo para comenzar? A continuación te doy mis recomendaciones.
Existe tanta información en internet, que tener una única respuesta a estas preguntas puede parecer difícil. Mi recomendación general como pediatra especialista en alimentación complementaria es que inicies esta etapa de tu bebé a los 6 meses de edad. Recuerda que como su nombre lo indica, la alimentación complementaria no es un reemplazo de la lactancia ni la fórmula infantil.
Algunas asociaciones como la ESPGHAN y NASPGHAN sugieren que puedes iniciar la alimentación complementaria entre los 4 y los 6 meses de edad, pero nunca antes. Si te adelantas y brindas otros alimentos antes de tiempo tu bebé tendrá mayor riesgo de alergias alimentarias y adiposidad; por otro lado si atrasas demasiado la alimentación complementaria también puedes favorecer alergias alimentarias y disminuir la aceptación de tu bebé de algunas texturas y sabores más complejos.
En mi opinión, un bebé que ha sido amamantado desde su nacimiento puede comenzar a los seis meses, ese es un buen momento para iniciar. Sin embargo, todos los bebés son diferentes y tienen requerimientos distintos. Además de la temporalidad, es importante que tu bebé tenga algunas habilidades que son un indicador que ha alcanzado la madurez suficiente para iniciar su alimentación complementaria.
Tu bebé se sostiene sentado en la silla: Esto no significa que el bebé va a sentarse como lo haría un adulto, sin embargo es muy importante que cuando esté sentado en una superficie cómoda y sólida, permanezca estable y pueda sostener su cabeza sin tambalearse.
Tiene coordinación ojo - mano - boca: Tu bebé debe poder coordinar los tres epicentros sensoriales de su cuerpo, los ojos, las manos y la boca. Si tu bebé se interesa por algo con la mirada, traducirá esto a la acción de intentar alcanzarlo con la mano y cuando lo obtenga, se lo llevará a la boca. Esto también significa que deberás estar muy atenta a las medidas de seguridad en casa, porque el bebé intentará llevarse a la boca todos los objetos que pueda. Después de todo, está aprendiendo a conocer el mundo.
Ya no tiene el reflejo de extrusión: Es importante que tu bebé sea capaz de tragar los alimentos que se lleva a la boca y desaparezca el reflejo de extrusión. Recuerda que hasta el momento tu bebé solo ha tenido experiencia alimentándose con tu leche materna o con fórmula infantil y no sabe cómo interactuar con otro tipo de texturas. Cuando un bebé tiene el reflejo de extrusión automáticamente expulsa con la lengua todos los alimentos que se lleva a la boca. Este reflejo suele desaparecer automáticanente entre los 4 y los 6 meses de edad.
No te afanes si no cumple todos los hitos del neurodesarrollo de manera inmediata al cumplir 4 o 6 meses. La alimentación no es una carrera. Debes observar a tu bebé, conocer su proceso e ir validando uno a uno cada hito con ayuda de tu pediatra, si así lo crees conveniente. Es poco habitual que tu bebé presente este trío de señales de forma simultánea antes de los 6 meses, por eso mi recomendación es que cuando manifieste estas señales estés lista para iniciar la alimentación complementaria y mantener la lactancia exclusiva o fórmula infantil.
Nuevamente debo recordarte el riesgo que implica retrasar el proceso de alimentación complementaria por miedo a los sólidos o desconocimiento.
Un bebé que a los 10 meses no ha probado alimentos sólidos tendrá mayores riesgos de desarrollar alergias alimentarias y desarrollar sensibilidad oral a ciertos tipos de texturas. Te cuento más al respecto aquí.
La educación es la mejor herramienta que tienes en esta etapa.
Por eso te recomiendo o tomar un curso de alimentación complementaria, o conocer más sobre el proceso para que puedas estar capacitada, tranquila y segura de lo que estás haciendo. En mi curso Aprendamos a comer puedes ir a tu ritmo con más de 30 lecciones práctica y conocer medidas de seguridad que te darán mayor tranquilidad. También tienes a tu disposición mi libro Enséñales a comer para toda la vida, que será esa herramienta que te acompañe en el proceso.